domingo, 19 de septiembre de 2010

La quintaesencia del Romanticismo


Liszt al piano. Ante el busto de Beethoven - obra de Anton Dietrich - Franz Liszt toca el piano. sentados, Alexandre Dumas, padre, George Sand (Aurore Dupin, baronesa Dudevant), condesa de Agoult. De pie: Hector Berlioz, Niccolò Paganini y Gioachino Rossini. Cerca de la ventana, un retrato de Lord Byron. A la extrema izquierda, en penumbra, una estatuilla de Juana de Arco. Óleo de Josef Danhauser (1840), Staatliche Museum, Berlín

Son pocos los ginebrinos que saben que uno de los mayores genios dela música universal vivió un año en la Vieille Ville de Ginebra, huyendo del escándalo que había provocado su liaison con la Condesa d'Agoult, mujer casada, con hijos y con una posición en la alta sociedad parisina.
Ginebra a querido conservar el recuerdo de estos amores adúlteros con una placa sobria, colocada en el inmueble que alojó a Liszt y a Marie de Agoult durante unh año, y dando el nombre de Place Franz Liszt a una pequeña plaza adyacente a la rue Trabazan y Etienne-Dumont.
Porqué dedicar todo un espacio a tan sólo un año de estos amores que, mal que bien, dejaron su marca en la ciudad de Ginebra? No sólo por el genio musical de Liszt ni por la gloria literaria de la Condesa de Agoult, cuyos libros firmados con el seudónimo de Daniel Stern duermen el sueño del tiempo en las viejas bibliotecas. No. Se trata sobre todo de recrear la pequeña corte intelectual que rodeó a los amantes y que por un año hizo de Ginebra uno de los centros mundiales de la música, la literatura y las bellas artes, sino también para intentar dilucidar si un genio puede ser encasillado en los límites burgueses de un hogar, un trabajo y una vida arreglada, algo con lo que todos los que no tienen "duende" sueñan.

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